MI NAVE ESPACIAL

Un viejo tambo donde alguna vez se transporto productos quimicos y que en ocaciones mi madre lo usaba para almacenar agua, era mi escondite perfecto en ciertos dias, y mi nave espacial, en otros.

Armada con dos palos de escoba, que hacian las veces de lanzacohetes, y que seguro estaba , amedrentarian a quien ozase aproximarse a ella, incluyendo a el perro de dona lola, y a mi enfurecida madre, cuando despues de buscarme por todos lados no me encontraba.

Ademas de mi nave contaba tambien con un castillo encantado, que se ubicaba justo arriba de el unico cuarto de mi casa que tenia techo de concreto, y donde descansaban otros dos tambos identicos a mi nave espacial, solo que estos funjian como tanques de agua para mi mama, y como torres, atalayas, de un lugubre castillo para mi y mi hermana; Gigantesco lugar donde corriamos mi hermana y yo, y que recientemente me percate que era una area de tan solo cuatro metros cuadrados, donde mi hermanita gritaba al ver ratas y aranas, imaginanado que eran emisarias de una corrupta hada, y donde yo en su defensa desenvainaba mi espada hecha por la costilla de un huacal de madera, y ligas, que disparaban corcholatas pero que segun yo desintegraban a mis enemigos.

Las hormigas en cambio eran nuestras aliadas, ya que si haciamos caminar a una de ellas por nuestro cuello nos proporcionarian de sabiduria y fortaleza propia de estos insectos, que se dice pueden cargar hasta 15 vecez su peso, tratabamos de tapar la entrada de los hormigueros, cuando adivinabamos al oler la ventisca fria, que se aproximaba la lluvia, para asi protejer a nustras amigas. Esa misma lluvia anunciaba tambien el llamado de hacerce a la mar, un mar negro que nacia a partir de una cloaca tapada y que permitia que el agua de lluvia se estancara, para formar mi mar negro, enorme, un mar que era solo mio, y que solo compartia con algunos vecinitos que, por encontrarce dicho mar en parte frente a sus casas, tambien reclamaban derechos de propiedad. Surcaba ese mar con un velero de casco fuerte, el cual mostraba orgulloso a babor la leyenda: "sardinas calmex", y a estribor la figurilla de un pez.

Pero lo que mas disfrutaba, era subirme a esa nave espacial al atardecer, justo cuando el cielo empesaba a estrellarse, y el silbido de el carrito de camotes anunciaba el ocaso de la luz del dia. Con la ayuda de dos tabiques, enfilaba mi nave hacia el cosmos, mientras me recostaba dentro de ella y afinando mi mirada cerraba un ojo y lo coordinaba con la punta de mi dedo indice para jugar senalando el cielo, y formar figuras con las estrellas, sonando volar a el espacio, y hacer lo mismo que en esos momentos hacia, solo que esta vez desde el espacio, y poder hubicar y senalar mi casa.

Sonaba viajar a un pais lejano y no volber jamas, dejando todo atras, dejando todo atras.......... Sin importar dejar a mama y papa, y a mi fiel escudero de el castillo encantado, mi pequena hermana, y no volber jamas y no volber jamas.

Emigrar a otras tierras en mi nave,armado con mi rifle lanza corcholatas, a conquistar otro mundo y vislumbrar nuevos orizontes, conocer nueva gente y escuchar otros idiomas y no volber jamas y no volber jamas.

Esa noche me enfunde en esa camisa gris, un viejo pedaso de tela, que por su tamano me venia como tunica, me encantaba!! Y aunque muy vieja, esta era magica, todo me salia bien al usarla, muchas veces se lo dije a mi hermanita, aunque ella incredula lo negaba, de hecho un dia la fuerza magica de mi camisa gris, hiso que mi maestra se le olvidara revisar mi incompleta tarea, y en mas de una ocacion ayudo con su hechizo a que mi papa no me pegara, en aquellas noches cuando mi madre se alzaba como fiscal y mi padre hacia las veces de juez buscando el castigo justo para mis travesuras.




Esta noche todo se conjugaba para bien, y se respiraba una paz infinita al contemplar el halo de la luna, banando de luz el cielo. Y yo, ya enfundado en mi magica camisa me dispuse a abordar mi nave, me recoste en ella como todas las noches.







Mi nave, una vez mas quedo apuntando al cielo,y mi mirada tambien, entrecerre un ojo, apunte, y senale esa mi estrella favorita, que brillo tintilante de manera diferente como contestando a manera de saludo mi atencion en ella, y en ese instante oi su voz: "-Soy deneb, la estrella que obvserbas noche a noche, se de tus deceos, y te ayudare a conceguirlos, tus cosas mas valiosas las he empacado en esta pequena bolsa de terciopelo que sursire a tu camisa gris. Hagas lo que hagas nunca deveras perder esta bolsa, ya que si lo haces, nunca jamas podras regresar a casa, en ella llevas tesoros invaluables, que una ves perdidos, no podras recuperar nunca,y sin ellos seras diferente fisica y emocionalmente, no lo olvides es muy importante que no pierdas tu bolsita, y ahora preparate que tu navio va a despegar de un momento a otro"- queria volar, y en ese instante lo pedi, si!!! quiero volar a otra tierra, a otra epoca, en otro ano, sujete esta pequena bolsa contra mi pecho y aprete mis ojos y mis punos con mucha fuerza, quiero ser grande y estar lejos!!!!! Mi camisa gris o tal vez daneb lo hicieron posible.








Hace no mucho, desperte un dia para encontrarme totalmente paralizado, me senti entrampado, desconsertado, con la sensacion de estar aprisionado en un cuerpo que no me pertenecia, y en una tierra lejana, lejos de papa, mama, y mi fiel escudero, mi hermanita, tengo barba y arrugas en mis ojos, algunas canas y un conato de panza de manera ordinaria. En donde estoy la gente habla otra lengua y come diferente, no me gusta el olor de mi cuerpo, siento un raro impulso por fumar, y en ocaciones hasta por beber, me siento raro, diferente. Puedo tomar decisiones propias y asta conducir un veiculo que aparantemente es mio, pero extrano a mama, no me gusta estar aqui, pero no puedo encontrar mi vieja camisa gris ni mi nave espacial, tengo ya hijos y muchas obligaciones, una mujer con la que duermo!! pero........quiero ver a mi papa, ya no quiero estar aqui, pero no encuentro mi camisa gris ni mi nave espacial.

Tube que recurrir a deneb la estrella, y le dije que no encontraba mi camisa gris, pero que queria regresar a casa, -tu camisa no importa- me dijo - lo que de verdad te impide regresar a tu "estado anterior" es que perdiste la bolsita de tersiopelo que llevabas sursida a tu camisa, y que advertido estabas, que una vez perdida jamas la recuperarias,

-Pero por dios!!!! que era eso tan importante que perdi -le dije llorando- y ella me contesto: E aqui la lista de lo perdido, en esta bolsita llevabas:

La fe

La esperanza

La inocencia

La honrradez

El respeto

El amor propio

la sensillez, etc etc.